LA ZARZA DE PUMAREDA EN MI CORAZÓN

Sinopsis

En este conjunto de relatos quiero retratar las vicisitudes del mundo rural, en concreto las estampas de mi pueblo, La Zarza de Pumareda, en el oeste salmantino, junto al cañón del Duero y sus Arribes que nos separan de Portugal.

A través de los relatos se descubre la forma de vida básicamente de los años 50 y 60 del siglo pasado, la emigración y la posterior despoblación, pero también se resalta el paulatino progreso de la sociedad con la llegada de la democracia, el agua corriente y otras comodidades.

Están presentes, sobre todo, las costumbres del mundo rural en su conjunto, las tradiciones, el duro trabajo del campo, pero también la celebración de numerosas fiestas, la belleza del entorno campestre con robles y escobas en abundancia, con sus chozos de piedra “cabañas”, como símbolo de un tiempo pasado y, en definitiva, se destaca la importancia de lo esencial: el fluir de los días al ritmo de la naturaleza.

Se resalta el poderoso vínculo afectivo que se crea con el lugar donde uno echó sus raíces, la impronta indeleble y el carácter que se va forjando a través de las calles donde jugó, con el campo que recorrió, con los animales domésticos que compartió días, con el sinfín de olores y aromas; los culinarios, los de los frondosos huertos y el ancho campo, el inconfundible olor a tierra mojada que traían las tormentas del estío. Más que el arranque de lo que uno sería más tarde, diría yo que es el destino el que se labró en esos primeros años de existencia, algo que uno va descubriendo en la edad madura.